
Zacatecas tiene hoy un rostro muy diferente al de 2010, cuando la inseguridad provocaba que en nuestras familias reinara la desconfianza y el desánimo al salir a la calle o transitar en las carreteras.
La inseguridad era la principal razón para que los empresarios locales, nacionales y extranjeros no contemplaran a nuestro estado como destino de sus inversiones.
Conscientes del freno que representaba para el desarrollo esa situación, nos concentramos, sociedad y gobierno, en la urgente necesidad de romper esa realidad; claros estábamos desde entonces que sin seguridad no había inversiones posibles, y menos suficientes.
El retorno de la seguridad se convirtió en la mayor prioridad para rescatar a Zacatecas.
Para ello hemos realizado, en cinco años, la más grande inversión en materia de seguridad pública: 3 mil 500 millones de pesos, que en otras condiciones pudieron ser destinados a proyectos más lucidores de obra pública, pero que optamos desde el principio por invertirlos en la infraestructura, el equipamiento, la capacitación, los salarios para el personal de seguridad y la procuración e impartición de Justicia.
EMPRENDIMOS 10 ACCIONES CLAVES:
PRIMERA.- La edificación, con recursos exclusivamente estatales, de dos cuarteles militares en Jalpa y Fresnillo, que han permitido el retorno de la confianza en las diversas regiones de la entidad.
SEGUNDA.- La construcción de cinco Unidades Regionales de Seguridad en Trancoso, Río Grande, Villa de Cos, Sombrerete y Malpaso, compuestas por arcos integrados al sistema de resguardo carretero que facilita la prevención y contención de la delincuencia.
TERCERA.- El aumento en cinco veces del número de elementos de la Policía Estatal Acreditada, el incremento sustancial de los efectivos de la Policía Ministerial y las mejoras de sus prestaciones laborales, creando, además, la Policía Metropolitana Zacatecas – Guadalupe.
CUARTA.- La instalación de un avanzado sistema de video vigilancia en los municipios más poblados del estado.
QUINTA.- La construcción de 12 Casas de Seguridad Pública Municipales y la modernización de 16 Centros Penitenciarios.
SEXTA.- La creación del Mando Único Policial, reflejo de la voluntad de los ayuntamientos del estado, que facilita la coordinación y colaboración de las corporaciones de seguridad pública.
SÉPTIMA.- La operación del Centro Estatal de Prevención del Delito y Participación Ciudadana.
OCTAVA.- La puesta en marcha del Centro de Operación Estratégica para el Combate al Narcomenudeo.
NOVENA.- La edificación de las nuevas instalaciones de la Policía Ministerial, y
DÉCIMA.- El inicio del Centro de Justicia para las Mujeres.
Gracias a todas estas decisiones tomadas a tiempo, el Sistema Nacional de Seguridad Pública ha ubicado a Zacatecas, en los dos últimos años, dentro de los 10 estados con la tasa de incidencia delictiva más baja.
Esos resultados no hubieran sido posible sin el respaldo de las Fuerzas Federales.
Al Ejército Mexicano, a la Marina Armada de México y a la Policía Federal, instituciones fundamentales del Estado Mexicano, les expreso, en nombre de la sociedad y del Gobierno del Estado, nuestro más amplio reconocimiento y agradecimiento, por su invaluable aportación a la paz en el estado.
¡Muchas gracias por su extraordinario respaldo a las familias zacatecanas!
Adicionalmente y en cumplimiento de nuestra obligación, la implementación del Nuevo Sistema de Justicia Penal tiene un avance del 80 por ciento.
Su implementación total estará concluida en enero del próximo año, seis meses antes de la terminación del plazo legal.
Mediante estas acciones ahora Zacatecas tiene un nuevo rostro.
La paz social y la convivencia armónica, son elementos poco apreciados cuando existen y se convierten en la primera necesidad de la población cuando se ausentan.
Con el retorno de la tranquilidad, hemos alcanzado un dinámico crecimiento económico que seguiremos impulsando, indispensable para satisfacer la urgente demanda de empleos.

