Zacatecas.- Con mucha alegría y entusiasmo, internas del CERESO femenil recibieron a Tannia, I reina de la FENAZA 2017, sus princesas Karely y Angélica; convivieron con ellas al ritmo de la música de mariachi y además disfrutaron de un delicioso pastel. La corte real y sus anfitrionas disfrutaron cada momento que pasaron en el centro de readaptación.

En una pasarela, la reina y sus princesas mostraron los trajes que han usado en eventos especiales dentro de las actividades de la Feria Nacional, entre ellos el de sevillana, usado para las corridas de toro; el traje de charra, usado en la tradicional romería y charreada, además del vestido de gala usado en la noche de coronación. Al momento de la pasarela describieron el significado de cada vestuario.

Al ritmo de las notas del Mariachi Colonial, invitado especialmente para amenizar el evento, las internas disfrutaron de cada una de sus canciones que solicitaban, cantando y bailando -en algunas ocasiones- cada una de ellas y divertirse de una forma alegre y especial.

Por su parte la reina y sus princesas dirigieron un mensaje, en el que mencionaron sentirse muy contentas de visitarlas y agradecidas de llevarles una sonrisa. Además agradecieron el buen recibimiento que tuvieron, la convivencia y el rato ameno que pasaron con ellas. Las jóvenes cumplieron sus expectativas de llevar alegría y momentos agradables para que se sintieran parte de la máxima festividad de los zacatecanos.

Por su parte, Rosa Martha Vázquez, directora del CERESO Femenil, señaló que las 79 internas, siempre tienen el día ocupado, ya que existen talleres de bordado de listón y rafia, bisutería, entre otros, además de actividades deportivas y educativas. De la misma manera resaltó que las chamarras que Gobierno del estado está donando a instituciones educativas del nivel básico, son con confeccionadas por ellas.

Como cada año para la FENAZA es un placer seguir participando con la tradicional visita de la corte real zacatecana. En esta edición, Tannia, Karely y Angélica acudieron con mucho agrado y ánimo de poder convivir con la población femenil del Centro de Readaptación de Zacatecas.